El Valle de Elías Piña, República Dominicana, es una zona que durante años ha vivido en extrema pobreza. Las personas no pueden satisfacer varias de las necesidades básicas para vivir y carecen por tanto de los bienes y servicios necesarios para sobrevivir, crecer y desarrollarse.
Principalmente las familias viven de la agricultura y ganadería y los trabajos están muy marcados por el género. Los hombres suelen trabajar en el campo y las mujeres están en casa a cargo de los más pequeños de la familia, realizan las tareas del hogar, lavan la ropa, van al mercado a comprar o vender, y, además, trabajan la tierra si tienen algún terreno. Las mujeres, en general, tienen más carga.
Partimos de una realidad donde sobre todo los niños y las niñas pasan hambre, están malnutridos, no tienen asegurado un plato de comida digno al día y sufren las consecuencias que esto conlleva, tanto físicas como de desarrollo intelectual
El objetivo principal del proyecto «La alimentación importa» es conservar la salud, preservar la vida, prevenir enfermedades y favorecer el desarrollo tanto físico como psicosocial y emocional del niños y niñas y sus familiares.
Para conseguirlo la Escuela es principal y clave. Allí se ofrece al alumnado desayuno, comida y merienda. En un principio, eran las madres y adolescentes quienes colaboraban de manera desinteresada en la elaboración y reparto de la comida. Ahora, hay madres contratadas por el Ministerio de Educación que se encargan de estas tarea. Igualmente, el alumnado también se implica en el reparto de la comida y limpieza del menaje.
EL PROYECTO EN CIFRAS
Presupuesto: 20.300 euros
Beneficiarios directos: 271 mujeres y 240 hombres
Beneficiarios indirectos: 106 mujeres y 96 hombres
RELACIÓN CON LA AGENDA 2030
Este proyecto contribuye a garantizar el ODS 2: hambre cero y el ODS 4: educación de calidad.